El tiempo es una magnitud imparable, la cual, no somete a cambios incesantes, es por ello que aunque hayamos instalado el mejor equipo del mercado, este será influenciado por las horas de uso y agentes externos.
Es por ello que, es de vital importancia, realiza con regularidad un buen mantenimiento preventivo, con el fin de reducir al máximo la probabilidad de sufrir una avería, ya que, los fallos graves suelen dar indicios con anterioridad: el aire acondicionado no enfría, genera escarcha, presenta ruidos anómalos, etc.